Retroceder

Al Cesar lo que es del Cesar y a mi lo que me toca que no es poco…

Como el ratoncito mas espabilado de “Quien se ha llevado mi queso” ((sabia metáfora de la vida misma)), al encontrarme en un callejón sin salida en el cual ya he agotado la existencia de queso, retrocedo.

Retrocedo en mi propio laberinto dejando en las paredes señales con la intención de no repetir(me) y encontrar nuevos sitios en los cuales el queso abunde.

Sin tristeza reconozco que debo volver. Creí que esta era la oportunidad de realizar mis sueños, de tenerlo todo en uno y descubro que es demasiado pretencioso de mi parte, al menos para que suceda de forma mágica… 

No estoy preparada para lo que deseo y jode pero no es mi intención malgastar esta unión en quimeras imposibles para el momento.

Vuelvo a mi condición de orgullosa aprendiz de esclava sin rencor hacia mi misma porque…

Amo mio, lo amo demasiado 

para arriesgarlo...